Es crucial conocer la eficiencia de nuestras instalaciones más costosas: una vez sabemos en qué punto estamos, podemos tomar medidas para mejorar su productividad.
Es una gran contradicción invertir una elevada suma en una instalación y no conocer su eficiencia (es decir, cuánto estamos aprovechando realmente esa inversión). Y a pesar de ello, es frecuente no disponer de estos datos.
La eficiencia de una máquina o instalación se mide considerando su disponibilidad, su rendimiento, y el nivel de calidad de los productos que fabrica, a través de la relación porcentual conocida como OEE (Overall Equipment Effectiveness).
Máquinas o instalaciones con grandes tiempos de cambio, con averías frecuentes, generadoras de rechazo o infrautilizadas serán puestas en evidencia a través de la monitorización de su eficiencia.
Seguimos este proceso para localizar y atajar pérdidas en sus máquinas:
– Análisis del ABC de máquinas e instalaciones (máquinas capacitivas y elevadas inversiones)
– Medición del OEE actual en las máquinas A.
– Análisis de las pérdidas, propuestas de mejora. Localización de cuellos de botella.
– TPM para reducción de microparos.
– Mantenimiento preventivo para reducción de averías.
– SMED para mejora de tiempos de cambio.
– 6 Sigma o DMAIC para estabilización de procesos y aumento de la calidad.